Hola.
Esto no es una guía mágica para volverse millonario de la noche a la mañana, sin hacer nada de nada. Esto es una reflexión sobre el siguiente tema:
Por qué razón ofertas como "Hazte rico sin trabajar, con este método infalible a prueba de tontos!", funcionan y logran que alguna o algunas personas caigan en la trampa, y paguen un dinero que nunca jamás volverán a ver?
"Gana dinero fácil y rápido. Garantizado". "Gana dinero mientras duermes. Nosotros hacemos el trabajo por ti". "Invierte 10 y gánate 10,000.00". "Te cuento el secreto mediante el cual me hice millonario, por un precio ridículo, porque quiero que tú también tengas éxito". "Último aviso - A la venta guía completa: Cómo hacerse rico en 24 horas haciendo nada más que relajarse y esperar - Rebajada de US$100.00 y solo por hoy a US$19.99". "A mi me pasó: me gané ochocientos mil y solo invertí 50 pesos, aunque no lo creas. También puede pasarte a ti, si compras este método".
Son títulos que nos seducen, nos enamoran, nos ilusionan. Nos llenan de esperanza, nos hacen creer que en verdad ocurren milagros. Profundas y misteriosas razones sicológicas nos llevan a creer en esas afirmaciones, solo porque están escritas. Y porque fueron escritas por personas que no conocemos. "Nadie es profeta en su tierra". Si escucháramos esas promesas de alguien que conocemos bien, de un familiar o un amigo por ejemplo, al menos dudaríamos. Pero si lo vemos escrito, y es de alguien que ni conocemos ni conoceremos, casi automáticamente creemos, o al menos le damos el beneficio de la duda. Es el principio mediante el cual logran votos los políticos: prometer imposibles, porque si te dicen la verdad, los detestarías y jamás votarías por ellos. O tú votarías por alguien que dijera: "Seamos realistas. No saldremos de la pobreza ni de la corrupción ni siquiera en 20 años, cuando menos."??? Las mentiras son bonitas. La realidad es fea. Admítelo: entraste a leer este post seducido por la posibilidad de ganarte un millón de dólares sin hacer nada... o no...?
Moraleja:
Por más tentador que sea, por más dulce que te sepan los labios cuando casi saboreas los millones prometidos... no es verdad... es una triste y cruel mentira. Es demasiado bueno para ser verdad. No es pesimismo. Es simple sentido común.
Todos los comentarios y experiencias, a favor o en contra, son bienvenidos.