A mi me hace gracia que algunos "odien" a los españoles por el oro, cuando ese oro no fue a España, sino a la Iglesia, al Vaticano (que está lleno de oro azteca) me hace gracia por que si el cristianismo existe es básicamente por la fuerza que le da Latinoamérica, es decir: "Te odio España por que robaste oro, pero creo, amo y vivo conforme al cristianismo que nos impusisteis y el cual se llevó nuestro oro". En aquella época las naciones no se guiaban por nacionalismos, ni patriotismos, sino por religión. La mejor forma de repudiar todo aquello (yo lo repudio) es justamente rechazando al cristianismo. La llegada de los españoles no fue diciendo "Amar a España y renunciar a Latinoamérica u os m4tamos" fue "O sois cristianos, u os m4tamos" (Así funcionaba el cristianismo, lo hizo en Europa, y lo hizo en Latinoamérica) y hoy, siglos después, la relevancia del cristianismo existe gracias a Latinoamérica. La forma más lógica, patriótica y digna de repudiar eso es precisamente rechazando lo que se os impuso, y no siendo la única razón por la que se sostiene el cristianismo.