Un paseo por el infierno

  • Autor Autor Rossiel
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Rossiel

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Parecía un lugar sin color, sin alegría. No es que las cosas fuesen a blanco y negro, pero definitivamente les faltaba poco para serlo.

Miré a todos lados y el entorno solo me trajo recuerdos de mi niñez, cuando mi madre me dejaba con mi hermana en casa de mis abuelos. Recordé ese desagradable sonido que hacían montones de pájaros al atardecer. Para mi era desagradable porque no se parecía en nada a los sonidos que hacían los pajaritos en las caricaturas que veía en la televisión. Esto era ruidoso y detestable, una mezcla de cuervos y loros salvajes que literalmente chillaban porque el sol estaba desapareciendo.

Había mucho polvo, por eso el color de todo era amarillento. No divisé ni una sola molécula de agua, ni siquiera había un pequeño rastro de humedad. Seguí mirando.

Había personas, muchas personas. Supuse que estaban cerca porque podía escuchar sus voces como si estuvieran murmurando.
Decidí no seguir parada como una tonta y empecé a caminar para buscar respuestas. Necesitaba saber dónde estaba, por qué estaba allí. Estaba parada justo en medio de un camino muy ancho, que no tenía concreto ni asfalto, solo polvorienta tierra amarilla; pero muy cerca había casas, supuse que las voces de las personas provenían de allí.

Empecé a caminar y pese a que no llevaba sino unos cuantos metros recorridos y que el sol no era tan fuerte, mi garganta estaba seca. Necesitaba agua, la anhelaba como nunca. Eso era extraño.

De pronto sentí que una mano sujetó mi brazo. Me di la vuelta sorprendida y era un joven. De estatura mediana, piel blanca y cabellos castaño oscuro. Nunca lo había visto, pero su semblante me era tan familiar, como si lo conociera de toda la vida.
-¿Ni siquiera aquí dejas de tomar decisiones apresuradas? - Me dijo con un tono tan cálido, como si fuera mi mejor amigo.
-¡Por supuesto! No voy a quedar en medio de la nada cuando ya casi va a anochecer - Le dije siguiéndole el juego.

El chico me miró fijamente con una mueca en su rostro, no descifré si era una sonrisa o no. Seguramente se sorprendió de que mis primeras palabras hacia él no fueran las desesperadas preguntas ¿Quién eres? ¿Dónde estoy? Que obviamente querían salir de mi boca, pero en caso de que esta persona quisiera hacerme daño no quería parecer alguien disponible para sus fechorías.

-No quieras parecer sensata, sabes que no lo eres - Dijo él como si me conociera de toda la vida.
-¿Quién eres cómo para decir eso? - Dije dándome por vencida. Mi mente pensó: joder, mátame si es lo que quieres.
-Confórmate con saber que estás aquí porque así lo quiso tu padre - Respondió con una mirada arrogante y odiosa.

Me quedé pensativa y confundida por unos momentos. Mi padre, si así podría llamarle, nunca fue bueno cumpliendo su rol; pero jamás pensé que vengara mis rechazos y desplantes enviándome a un sitio como en el que estaba.

-Deja de pensar tonterías - Dijo como si encima de todo pudiera leer mi mente.
-¿De qué hablas? - Lo mire perpleja y con mucha curiosidad.
-Richard solo fue un recipiente, poca importancia tiene tu padre terrenal. De quien hablo es tu verdadero padre, ya deberías saberlo. Pero pierde cuidado al final de todo, lo verás. - Me dijo dejando mi cabeza más confundida que antes.

Nuestra conversación fue dándose mientras caminábamos e íbamos acercándonos cada vez más a las casas. Seguía escuchando voces, pero la única persona que había visto hasta ahora, era este hombre que ni siquiera había tenido la gentileza de decir su nombre aún.

Las paredes de aquellas construcciones eran raras. No tenían color sobre la superficie, solo muchas capas de polvo amarillo adherido. Cada una tenía solo una ventana, aunque había otras que no tenían tan siquiera una. La puerta...este era otro tema que me sorprendía. No había puertas. No había nada en las entradas. Los pisos no existían, solamente la tierra amarilla endurecida se podía observar en el interior. Tampoco había electricidad, no había postes, bombillas ni cables de ningún tipo.
Seguimos caminando en silencio. Me pude dar cuenta de inmediato de que aquel lugar estaba desolado. Al parecer las voces no provenían de este sitio como pensé al principio.

La confusión embargaba mi mente, pero no dejaba de pensar que el chico que caminaba a mi lado, no era un extraño. Lo sentía familiar. No le temía, por alguna razón supe que no me haría daño.

Detallé su aspecto de arriba abajo nuevamente. Estaba descalzo, usando lo que parecía un trozo de tela vieja y desgastada para cubrir todo su cuerpo. Encima llevaba un bolso que cruzaba desde un hombro y le llegaba hasta la cintura. Todo él estaba sucio, lleno de polvo amarillo. El cabello lo tenía largo, como alguien que tiene seis meses sin ir al barbero. El chico no se veía feliz, más bien parecía alguien asustado tratando de verse fuerte inútilmente.

No pude seguir silenciando mis dudas por más tiempo y de repente empiezo con el interrogatorio que ya no puedo callar y que me es muy importante para entender lo que sucede.

- ¿Estoy soñando? - Le dije. Sabiendo que desde niña tengo sueños tan reales que dan miedo.
-No lo sé, dime tú - Me dijo cortante.
-¿Morí? - Pregunté nuevamente, ya que no recordaba nada.
-Tampoco, lo sé. Pero puedes estar segura de que yo no estoy vivo. Lo estuve un tiempo, pero ya olvidé mi vida excepto las razones de por qué estoy aquí. - Me dijo, dejándome peor de confundida. Al parecer mientras más trataba de entender, más dudas surgían.

¿Acaso hablaba literalmente o solo era una forma metafórica de ver la vida? Seguimos caminando. Él llevaba afán, yo en cambio caminaba a paso lento observando todo lo que me rodeaba.

-¿Caminarás o tendré que encadenarte? - Dijo muy serio.
-¿De dónde vienen las voces si no hay nadie por aquí cerca? - Pregunté ignorando lo que acababa de escuchar.
-Hay muchas personas aquí, ¿o acaso piensas que las casas son solo decoración? - Respondió en un tono irónico.
-Yo no veo a nadie - Dije con un tono burlón.
-Que no veas algo no significa que no esté allí. - Sonaba como una persona triste.

El muchacho me indicó que lo siguiera. Se dirigió hasta una de las casas a su izquierda y yo fui detrás de él. Cuando entramos me sorprendí al ver el interior.

Todo estaba oscuro, la única iluminación era la que provenía desde afuera. Al igual que todo lo que había visto el polvo de tierra amarilla era abundante dentro de las casas. Confirmé que no había pisos de concreto ni de ningún material que yo conociera, que no había electricidad y que el muchacho tenía razón, había personas allí.

En esa casa que entramos había una mujer sentada en el suelo, justo en una esquina. Tenía las rodillas pegadas al pecho y una cabellera negra y larga que estaba puesta hacía adelante. Me dio la impresión de que escondió el rostro cuando entramos.
Ella llevaba un trozo de tela similar al de mi acompañante cubriendo su cuerpo. Traté de acercarme para ayudarla a que se levantara pero de repente se levantó y vino encima de mi como intentando agarrarme. Extendió sus brazos y levantó la cara diciendo en voz baja pero repetidamente en tono desquiciado “estoy arrepentida, sácame de aquí”.

Me asusté y me alejé de ella rápidamente. Cuando pensé que me tomaría, algo la detuvo bruscamente. Escuché un sonido conocido, miré hacía el suelo y apenas pude notar las cortas cadenas que la sujetaban a una de las paredes. Salí disparada de allí como un cohete.

Mi respiración y mi corazón estaban agitados por la escena. Me detuve afuera de la casa para tomar aire, jadeaba y realmente necesitaba un poco de agua.

-No siempre lo mejor es ver para creer - Escuché decir al muchacho, quien venía lentamente hacía mi con una mirada y sonrisa triunfante.
-Yo no dije que no te creía - Intenté defenderme.
-Pero dudaste, aquí dudar y no creer es lo mismo - Dijo mientras seguíamos caminando.

Desde aquel momento el chico decidió parar en cada casa que podía para enseñarme su interior. Sin embargo, como aprendizaje de lo anterior, decidí que lo mejor era quedarme parada en la entrada para no pasar por algo similar.

La próxima casa a la que nos acercamos tenía una mesa de madera en el centro. Debajo de ella, había alguien acurrucado, no pude distinguir si era hombre o mujer, lo único que sé es que parecía un adolescente. Cuando sintió que llegamos no se esforzó en salir de allí, solo repetía una y otra vez “ya va a llegar, ya va a llegar”. La voz sonaba más como un murmullo desesperado de alguien que sufre mucho. No pregunté nada, solo me dediqué a observar.

Así hicimos en varias casas y siempre encontrábamos una escena similar. En algunas de ellas no había una sola persona, había dos, tres o más. Pude darme cuenta de que aquellas personas estaban sufriendo demasiado. Unos estaban mucho más sucios que otros, lo que me hacía pensar que quizás llevaban más tiempo allí. También supe que ellos no se alegraban de que nosotros nos acercáramos para ayudarlos, pues de alguna manera sabían que no podían salir de allí.

Me detuve un momento porque mi garganta seca me recordó lo mucho que anhelaba un trago de agua. Hacía demasiado calor allí, lo cual para mi era extraño porque el sol no era lo suficientemente fuerte y se estaba ocultando. Mire al cielo y no pude evitar comparar su color con el filtro para fotos “sepia” que mi anticuado teléfono tenía. Además las nubes no parecían nubes, en realidad se veían como el humo emitido de un volcán. Las dudas volvieron a mi cabeza y no las pude contener.

-¿Podrías llevarme a conseguir un poco de agua? - Le pedí al muchacho con la esperanza de que su respuesta fuera positiva.
-Lamento decepcionarte, pero el agua es una de las cosas que no podrás encontrar aquí. Todos nosotros anhelamos aunque sea un sorbo, pero estamos condenados a ello eternamente. - Su voz era áspera, parecía forzada.
-¿Cuándo comenzarás a darme explicaciones de este sitio? - Le dije mirándolo a los ojos.
-Lo siento, no estoy acostumbrado a hablar con nadie, por eso la comunicación no es un punto fuerte para mí. - Su actitud cambió, lo vi decidido a darme todas las explicaciones que estaba esperando.

Nos detuvimos a un lado del camino. Había hierba seca en las orillas y nos sentamos sobre ella. El muchacho empezó a contarme muchas cosas, entre ellas quién era y por qué estaba conmigo.

-No puedo decirte mi nombre o el nombre de cualquiera de los que veas aquí, algunos quizás los conozcas así que no te sorprendas. Tu padre me encomendó la tarea de ser tu guía en este paseo, porque él planea que puedas entender tu existencia para completar la misión que te encomendó en la tierra. Te estuve esperando por mucho tiempo, pero cada vez que venías te ibas antes de que pudiera acercarme. Yo no pertenezco aquí, pero para purgar mis penas debo cumplir mi tarea. Bienvenida al infierno.

Desde niña tengo sueños muy reales y muchos de ellos se repiten cada cierto tiempo. Peculiarmente en estos sueños no sucede lo mismo, pese a que es el mismo escenario las situaciones son diferentes. Por eso decidí empezar a plasmarlos en lo que mejor sé hacer: un escrito.

Lo más sorprendente de todo es que cuando le mostré esto a mi hermana para que lo leyera y me dijera su opinión su respuesta fue: yo también he tenido este sueño muchas veces.

Si les gusta seguiré escribiendo y publicando cada cierto tiempo una nueva parte.

¡Espero sus opiniones!
 
Última edición:
Vaya me ha parecido muy interesante lo que relatas. Si sigues publicando no dudes en citarme.
 
Curioso relato del paseo por el infierno. Intenta escribir un libro al respecto, no sólo de ficción, sino mezclando ficción y casos donde las personas dicen morir y visitar el infierno.
 
Última edición:
buen relato, ameno y bien escrito.

Gracias.
 
Gracias a todos por sus opiniones 😊
 
Quierooooo leer más, excelenteee.
 
si bien tienes ese don, deberías cubrirte con la sangre de Jesucristo porque eres propensa a ser atacada por fuerzas sobrenaturales..!! no es normal que tengas sueños con el INFIERNO... eso se lee muy satanico..!
 
El infierno es frio, me encanta saber que voy para alla y no al cielo.
 
si bien tienes ese don, deberías cubrirte con la sangre de Jesucristo porque eres propensa a ser atacada por fuerzas sobrenaturales..!! no es normal que tengas sueños con el INFIERNO... eso se lee muy satanico..!
Prefiero pensar que es un sueño, algo creado por mi mente, que por algo inexplicable es recurrente.
El infierno es frio, me encanta saber que voy para alla y no al cielo.
Hacía tanto calor como no lo puedes imaginar. Cada vez que lo sueño, el calor sigue allí...
 
Sigue relatando este tipo de historias que te suceden me encanta leerlas
 
Parece una especie de cuento erotico
 
Mucho texto.jpg xd (es broma) lo leeré más tarde y modificare mi comentario.
 

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Última edición:
pues los sueños tambien pueden ser reales.. ¿acaso no fue Jose quien les interpreto los sueños al faraon?
 
¿Qué tiene de erótico el infierno? 😅
«pronto sentí que una mano sujetó mi brazo. Me di la vuelta sorprendida y era un joven. De estatura mediana, piel blanca y cabellos castaño oscuro. Nunca lo había visto, pero su semblante me era tan familiar, como si lo conociera de toda la vida.
-¿Ni siquiera aquí dejas de tomar decisiones apresuradas? - Me dijo con un tono tan cálido, como si fuera mi mejor amigo.
-¡Por supuesto! No voy a quedar en medio de la nada cuando ya casi va a anochecer - Le dije siguiéndole el juego.

El chico me miró fijamente con una mueca en su rostro, no descifré si era una sonrisa o no. Seguramente se sorprendió de que mis primeras palabras hacia él no fueran las desesperadas preguntas ¿Quién eres? ¿Dónde estoy? Que obviamente querían salir de mi boca, pero en caso de que esta persona quisiera hacerme daño no quería parecer alguien disponible para sus fechorías.

-No quieras parecer sensata, sabes que no lo eres - Dijo él como si me conociera de toda la vida.
-¿Quién eres cómo para decir eso? - Dije dándome por vencida. Mi mente pensó: joder, mátame si es lo que quieres.
-Confórmate con saber que estás aquí porque así lo quiso tu padre - Respondió con una mirada arrogante y odiosa.»
 
«pronto sentí que una mano sujetó mi brazo. Me di la vuelta sorprendida y era un joven. De estatura mediana, piel blanca y cabellos castaño oscuro. Nunca lo había visto, pero su semblante me era tan familiar, como si lo conociera de toda la vida.
-¿Ni siquiera aquí dejas de tomar decisiones apresuradas? - Me dijo con un tono tan cálido, como si fuera mi mejor amigo.
-¡Por supuesto! No voy a quedar en medio de la nada cuando ya casi va a anochecer - Le dije siguiéndole el juego.

El chico me miró fijamente con una mueca en su rostro, no descifré si era una sonrisa o no. Seguramente se sorprendió de que mis primeras palabras hacia él no fueran las desesperadas preguntas ¿Quién eres? ¿Dónde estoy? Que obviamente querían salir de mi boca, pero en caso de que esta persona quisiera hacerme daño no quería parecer alguien disponible para sus fechorías.

-No quieras parecer sensata, sabes que no lo eres - Dijo él como si me conociera de toda la vida.
-¿Quién eres cómo para decir eso? - Dije dándome por vencida. Mi mente pensó: joder, mátame si es lo que quieres.
-Confórmate con saber que estás aquí porque así lo quiso tu padre - Respondió con una mirada arrogante y odiosa.»
Debes de dejar de leer en wattpad Hahahaha te está afectando
 
pues los sueños tambien pueden ser reales.. ¿acaso no fue Jose quien les interpreto los sueños al faraon?
Muy real un vaca comiendose otras vacas, con cual cormilo desgarra la carne, y una trigos tragandose otros trigos? Con que boca?

@Rossiel cualquier prueba de la existencia de un infierno dice que es frio, solo que la morbocidad de los cristianos puso lo caliente, para que mentes incultas lleguen a pensar que un alma intangible, puede quemarse, cuando lo unico que se quema es lo material. Como quemas la electricidad? Como quemas, la señal de wifi? Como quemas la energia invisible e inmaterial?

Como quemas al fuego?

Sin duda el infierno es frio! Y a me encanta el frio.
 
Debes de dejar de leer en wattpad Hahahaha te está afectando
Ni se que es guapat. Pero si leo entre lineas y parece una proyección subconsciente del deseo de ser abordada por un hombre caucásico apuesto, rudo y con mala actitud , en un lugar solitario, bajo el rojizo crepúsculo del cielo nocturno

Hasta puedo resumirlo con estas líneas del mismo cuento:

«Parecía un lugar sin color, sin alegría. No es que las cosas fuesen a blanco y negro, pero definitivamente les faltaba poco para serlo.

Empecé a caminar y pese a que no llevaba sino unos cuantos metros recorridos y que el sol no era tan fuerte, mi garganta estaba seca. Necesitaba agua, la anhelaba como nunca.

pronto sentí que una mano sujetó mi brazo. Me di la vuelta sorprendida y era un joven. De estatura mediana, piel blanca y cabellos castaño oscuro
Ni siquiera aquí dejas de tomar decisiones apresuradas? - Me dijo con un tono tan cálido, como si fuera mi mejor amigo.
-¡Por supuesto! No voy a quedar en medio de la nada cuando ya casi va a anochecer - Le dije siguiéndole el juego.

El chico me miró fijamente con una mueca en su rostro, no descifré si era una sonrisa o no. Seguramente se sorprendió de que mis primeras palabras hacia él no fueran las desesperadas preguntas ¿Quién eres? ¿Dónde estoy? Que obviamente querían salir de mi boca, pero en caso de que esta persona quisiera hacerme daño no quería parecer alguien disponible para sus fechorías.

-No quieras parecer sensata, sabes que no lo eres - Dijo él como si me conociera de toda la vida.
-¿Quién eres cómo para decir eso? - Dije dándome por vencida. Mi mente pensó: joder, mátame si es lo que quieres.
-Confórmate con saber que estás aquí porque así lo quiso tu padre - Respondió con una mirada arrogante »

osea, estaba sola, aburrida, sedienta y llega un papu lince lomo plateado en un escenario romantico, a hacerla sentir multiples emociones, sacandola de la rutina

Si no es cuento erótico, parece uno, o quizas sin darse cuenta lo hizo, no se.

Me recuerda a Marge cuando escribio un libro

 
Ni se que es guapat. Pero si leo entre lineas y parece una proyección subconsciente del deseo de ser abordada por un hombre caucásico apuesto, rudo y con mala actitud , en un lugar solitario, bajo el rojizo crepúsculo del cielo nocturno

Hasta puedo resumirlo con estas líneas del mismo cuento:

«Parecía un lugar sin color, sin alegría. No es que las cosas fuesen a blanco y negro, pero definitivamente les faltaba poco para serlo.

Empecé a caminar y pese a que no llevaba sino unos cuantos metros recorridos y que el sol no era tan fuerte, mi garganta estaba seca. Necesitaba agua, la anhelaba como nunca.

pronto sentí que una mano sujetó mi brazo. Me di la vuelta sorprendida y era un joven. De estatura mediana, piel blanca y cabellos castaño oscuro
Ni siquiera aquí dejas de tomar decisiones apresuradas? - Me dijo con un tono tan cálido, como si fuera mi mejor amigo.
-¡Por supuesto! No voy a quedar en medio de la nada cuando ya casi va a anochecer - Le dije siguiéndole el juego.

El chico me miró fijamente con una mueca en su rostro, no descifré si era una sonrisa o no. Seguramente se sorprendió de que mis primeras palabras hacia él no fueran las desesperadas preguntas ¿Quién eres? ¿Dónde estoy? Que obviamente querían salir de mi boca, pero en caso de que esta persona quisiera hacerme daño no quería parecer alguien disponible para sus fechorías.

-No quieras parecer sensata, sabes que no lo eres - Dijo él como si me conociera de toda la vida.
-¿Quién eres cómo para decir eso? - Dije dándome por vencida. Mi mente pensó: joder, mátame si es lo que quieres.
-Confórmate con saber que estás aquí porque así lo quiso tu padre - Respondió con una mirada arrogante »

osea, estaba sola, aburrida, sedienta y llega un papu lince lomo plateado en un escenario romantico, a hacerla sentir multiples emociones, sacandola de la rutina

Si no es cuento erótico, parece uno, o quizas sin darse cuenta lo hizo, no se.

Me recuerda a Marge cuando escribio un libro


Tu tienes la razon, Freud opinara lo mismo.
 
osea, estaba sola, aburrida, sedienta y llega un papu lince lomo plateado en un escenario romantico, a hacerla sentir multiples emociones, sacandola de la rutina

Si no es cuento erótico, parece uno, o quizas sin darse cuenta lo hizo, no se.

Me recuerda a Marge cuando escribio un libro
Tú tienes razón. A lo mejor mis deseos carnales se manifiestan en mi subconsciente de una forma inesperada.
 
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