Por favor, ten en cuenta 📝 que si deseas hacer un trato 🤝 con este usuario, está baneado 🔒.
Como se debe hacer un Buen Tutorial.!
Puede parecer simple. Tú sabes que lo sabes y crees que con saberlo debería bastar. Pero hasta el más genio de los genios puede encontrarse ante la imposibilidad de transmitir sus conocimientos. ¡Les pasa a los mejores, no te preocupes! Es que un tutorial se debe escribir para un lector con escasos conocimientos y, por lo tanto, responde a una dinámica de escritura muy pormenorizada, que debe seguir una estructura lineal, clara y concisa. ¿Necesitas un tutorial de cómo escribir tutoriales? Aquí tienes uno.
*El lector debe saber desde el principio para qué es el tutorial*
1) Título y descripción
Un tutorial es una guía que carece de valor literario. Por lo tanto, no es algo que se disfrute al leer. Por más didáctico que sea, por más ameno que lo hagas, no deja de ser una utilidad, la descripción de una tarea paso a paso. El título y la descripción deben ser lo suficientemente claros para que el lector determine si desea o no seguir leyendo. Fíjate el título de este mini tutorial: Free Video to MP3 Converter: Extrae MP3 de vídeos. Desde el título ya se establece el programa que se va a utilizar y para qué lo vamos a utilizar. El usuario, con solo leerlo, sabe si le interesa o no.
2) Observaciones
Es importante que antes de comenzar el paso a paso escribas las observaciones que creas convenientes. Este mismo tutorial comenzó con las recomendaciones que creímos eran necesarias hacer. Las observaciones dependen muchísimo sobre lo que escribas. Pueden ser simples consejos, una explicación de los métodos y programas que usarás, enlaces de descargas de programas que se van a utilizar durante el paso a paso, una lista de los “ingredientes” necesarios o una advertencia de los posibles problemas con los que se puede encontrar el lector.
Puede sonar feo. Pero imagina, en todo momento, que le escribes a un bebé. A un niño que no sabe siquiera prender el ordenador.
3) Paso a paso
Todos los tutoriales deben seguir un paso a paso claro y conciso. Sin palabras de más que distraigan la atención del lector. Debes ver la guía como una receta de cocina. Imagina que el usuario está siguiendo el paso a paso mientras hornea un pastel. ¿No querrás que se le queme porque tú no eres claro o usas palabrerío innecesario, verdad? En la misma línea, no dejes nada librado a la comprensión del lector. La ambigüedad es tu enemiga número uno. Para que esto no suceda, ver Paso 4.
4) Haz, luego escribe
Debes entender que el lector, si está usando un tutorial, es porque no sabe. Así de simple y crudo. Cosas que para ti son obvias, puede que para el lector no. Lo ideal, entonces, es escribir a medida que vas haciendo la tarea que explicas. Así, podrás documentar el paso a paso, sacar capturas, fotos o capturar vídeos. También evitarás la omisión de pasos y te asegurarás que el proceso funciona.
5) Numeración
La numeración también ayuda. Aunque pueda parecer irrelevante, sirve para la comprensión y la estructuración del tutorial. Te obliga a ti a seguir un orden y al lector a leer sin saltearse nada. Además, numerando puedes hacer referencia a puntos anteriores (por ej,: “Cómo vimos en el paso 5”) o evitar al usuario leer pasos irrelevantes.
6) Imágenes
Como te contamos en el paso 4, debes sacar imágenes del proceso. Eso de que “una imagen dice más que mil palabras” es una verdad universal, y más en el caso de los tutoriales. La escritura tiene sus límites, más cuando queremos mantener las cosas simples. Hay procesos que son complicadísimos de escribir, pero que con mostrar una imagen quedan ilustrados a la perfección. Tú te ahorras trabajo y los lectores esfuerzo y frustración.
Idealmente, cada uno de los pasos debería contar con una imagen de ejemplo, salvo que sean redundantes. Las imágenes, si son complejas, deben tener marcadas las partes a las que debe prestar atención.
7) Usar ejemplos
Si crees que algún concepto es difícil de entender, usa ejemplos al alcance de todos. Relee el Paso 3. Seguro que al comparar un tutorial con una receta de cocina, te habrás dado una buena noción de lo que quisimos decir. Si funcionó para ti, funcionará para tus lectores.
9) El que mucho abarca, poco aprieta
Nunca intentes enseñar más de una cosa por tutorial. Si para realizar un tutorial con éxito, el usuario necesita realizar tareas previas, que también requieran conocimiento y práctica, es que necesitas hacer dos (o más) tutoriales.
10) Relee, rehace y reescribe
Te sorprenderá ver la cantidad de errores que tendrá tu tutorial cuando lo termines. Sea porque lo escribiste apurado, por pequeñas incongruencias gramaticales o porque sí, la mayoría de las veces nunca es perfecto en la primera escritura. Si tienes dudas sobre la efectividad de la guía, pásasela a algún conocido que nunca haya hecho la tarea objetivo para que te brinde feedback. Si no tienes nadie que te ayude, síguelo tú, palabra por palabra. Si debes hacer algo que no esté escrito, debes agregarlo. Así de simple.
Siempre deja un canal de comunicación abierto para las dudas.
Puede parecer simple. Tú sabes que lo sabes y crees que con saberlo debería bastar. Pero hasta el más genio de los genios puede encontrarse ante la imposibilidad de transmitir sus conocimientos. ¡Les pasa a los mejores, no te preocupes! Es que un tutorial se debe escribir para un lector con escasos conocimientos y, por lo tanto, responde a una dinámica de escritura muy pormenorizada, que debe seguir una estructura lineal, clara y concisa. ¿Necesitas un tutorial de cómo escribir tutoriales? Aquí tienes uno.
*El lector debe saber desde el principio para qué es el tutorial*
1) Título y descripción
Un tutorial es una guía que carece de valor literario. Por lo tanto, no es algo que se disfrute al leer. Por más didáctico que sea, por más ameno que lo hagas, no deja de ser una utilidad, la descripción de una tarea paso a paso. El título y la descripción deben ser lo suficientemente claros para que el lector determine si desea o no seguir leyendo. Fíjate el título de este mini tutorial: Free Video to MP3 Converter: Extrae MP3 de vídeos. Desde el título ya se establece el programa que se va a utilizar y para qué lo vamos a utilizar. El usuario, con solo leerlo, sabe si le interesa o no.
2) Observaciones
Es importante que antes de comenzar el paso a paso escribas las observaciones que creas convenientes. Este mismo tutorial comenzó con las recomendaciones que creímos eran necesarias hacer. Las observaciones dependen muchísimo sobre lo que escribas. Pueden ser simples consejos, una explicación de los métodos y programas que usarás, enlaces de descargas de programas que se van a utilizar durante el paso a paso, una lista de los “ingredientes” necesarios o una advertencia de los posibles problemas con los que se puede encontrar el lector.
Puede sonar feo. Pero imagina, en todo momento, que le escribes a un bebé. A un niño que no sabe siquiera prender el ordenador.
3) Paso a paso
Todos los tutoriales deben seguir un paso a paso claro y conciso. Sin palabras de más que distraigan la atención del lector. Debes ver la guía como una receta de cocina. Imagina que el usuario está siguiendo el paso a paso mientras hornea un pastel. ¿No querrás que se le queme porque tú no eres claro o usas palabrerío innecesario, verdad? En la misma línea, no dejes nada librado a la comprensión del lector. La ambigüedad es tu enemiga número uno. Para que esto no suceda, ver Paso 4.
4) Haz, luego escribe
Debes entender que el lector, si está usando un tutorial, es porque no sabe. Así de simple y crudo. Cosas que para ti son obvias, puede que para el lector no. Lo ideal, entonces, es escribir a medida que vas haciendo la tarea que explicas. Así, podrás documentar el paso a paso, sacar capturas, fotos o capturar vídeos. También evitarás la omisión de pasos y te asegurarás que el proceso funciona.
5) Numeración
La numeración también ayuda. Aunque pueda parecer irrelevante, sirve para la comprensión y la estructuración del tutorial. Te obliga a ti a seguir un orden y al lector a leer sin saltearse nada. Además, numerando puedes hacer referencia a puntos anteriores (por ej,: “Cómo vimos en el paso 5”) o evitar al usuario leer pasos irrelevantes.
6) Imágenes
Como te contamos en el paso 4, debes sacar imágenes del proceso. Eso de que “una imagen dice más que mil palabras” es una verdad universal, y más en el caso de los tutoriales. La escritura tiene sus límites, más cuando queremos mantener las cosas simples. Hay procesos que son complicadísimos de escribir, pero que con mostrar una imagen quedan ilustrados a la perfección. Tú te ahorras trabajo y los lectores esfuerzo y frustración.
Idealmente, cada uno de los pasos debería contar con una imagen de ejemplo, salvo que sean redundantes. Las imágenes, si son complejas, deben tener marcadas las partes a las que debe prestar atención.
7) Usar ejemplos
Si crees que algún concepto es difícil de entender, usa ejemplos al alcance de todos. Relee el Paso 3. Seguro que al comparar un tutorial con una receta de cocina, te habrás dado una buena noción de lo que quisimos decir. Si funcionó para ti, funcionará para tus lectores.
9) El que mucho abarca, poco aprieta
Nunca intentes enseñar más de una cosa por tutorial. Si para realizar un tutorial con éxito, el usuario necesita realizar tareas previas, que también requieran conocimiento y práctica, es que necesitas hacer dos (o más) tutoriales.
10) Relee, rehace y reescribe
Te sorprenderá ver la cantidad de errores que tendrá tu tutorial cuando lo termines. Sea porque lo escribiste apurado, por pequeñas incongruencias gramaticales o porque sí, la mayoría de las veces nunca es perfecto en la primera escritura. Si tienes dudas sobre la efectividad de la guía, pásasela a algún conocido que nunca haya hecho la tarea objetivo para que te brinde feedback. Si no tienes nadie que te ayude, síguelo tú, palabra por palabra. Si debes hacer algo que no esté escrito, debes agregarlo. Así de simple.
Siempre deja un canal de comunicación abierto para las dudas.