Qué duro es esto. Mi viejo se nos complicó y falleció, hace apenas un mes su médico lo vio y tenía todo en orden, el marcapasos le andaba bien, pero su enfermedad cada vez le pesaba más, con el corazón ya muy agrandado, no aguantó. En medio de estas medidas, necesarias obviamente, pero no estamos la mitad de los hermanos, ni la mitad de mis tíos y gran parte de la familia, por no poder cruzar de una ciudad a la otra y toca despedirlo así, con la sensación de que falta gente que también lo quiere y querría despedirlo.
Obvio que las medidas son necesarias y nos protegen, pero es muy duro cuando se cruza con estas circunstancias. No se lo deseo a nadie.