Ejemplo de guion humorístico-musical 1
Beethoven el anacrónico - Ratzinger el beta
—Sirviente: Señor Beethoven, señor Beethoven, un rico e importante comerciante ha venido a encargaros una canción.
—Beethoven: Vaya, ¿es rico?
—Sirviente: Así es, mi señor.
—Beethoven: ¿Es importante?
—Sirviente: Joder tío, ¿acaso os estáis quedando sordo?
—Beethoven: Seáis imbécil, cómo podéis imaginaros que oído tan virtuoso como el del gran Beethoven se quedará sordo. Primero caerá Maduro.
—Sirviente: Lo siento, mi señor, tenéis razón como siempre, es que estuve viendo comiquitas chinas de nuevo.
—Beethoven: Y bien, ¿quién ser este comerciante como para atreverse a contratar los servicios del mejor músico del romanticismo y por qué debería aceptar su oferta?
—Sirviente: Responde al nombre de Ratzinger, mi señor, es un reconocido bachaquero y debemos aceptar porque nos va a pagar en harina PAN y Rikomalt.
—Beethoven: Ñelda, ¿en serio? Hace tiempo que no comemos arepa con huevo, sólo huevo.
—Sirviente: Ay valee.
—Beethoven: Dejad de mal pensar y decidle a ese hijo de puta que aceptamos su oferta con honor, sólo dame un momento que estoy atorado en el Monkey Island 2.
—Sirviente: Apuesto que se quedó en la parte donde debes usar el mono con la bomba de agua.
—Beethoven: ¿De qué habláis? Eso no tiene sentido, ¿cómo va a haber una bomba de agua en un juego de piratas?
—Sirviente: Creo que es un juego de palabras, mi señor.
—Beethoven: Dejaros de decir boberías y traedme la laptop que me regaló Bonaparte a ver si logro sacar la pala de la señal. Después compondré la canción.
[Cartel de muchas horas después de Bob Esponja]
—Beethoven: Ha sido un honor para vuestro servidor rebajarme al mundo criminal, que no juzgo, pues para ello existen personas con pelucas más costosas que la mía. Espero os deleitéis con mi última creación, compuesta con el cocoro de un magnífico músico para un mejor estafador.
[Música del opening de Mazinger Z]
¡Ratzinger! ¿En cuánto están los cigarros?
La harina PAN y el arroz, él todo puede encontrar,
bachaqueando, el mejor, Ratzinger.
Ratzinger hace colas todo el rato, pues tiene lucas,
y cuando los guardias le pillan pal fresco les da.
Es inmoral, es un ladrón, un maldito criminal,
pero nada le importa porque tiene mucho real.
Papel toilet encontrarás con Ratzinger, ¡sí!
¡Oye! Me hieden los sobacos,
¿el Múm en cien mil quinientos?
¡Ratzinger!
¡Hijo e puta!
¡Voy a llamar al Sundde!
¡Es sólo un desodorante!
¡Creí que éramos amigos!
¡Te van a quitar la mercancía!
¡Ratzinger!
Con punto cobra mucho más
así sea un piche jabón azul.
Vende desde pasta dental
hasta lo de su bolsa de Clap.
Ratzinger el beta, un maldito timador,
pero en los chinos nada hay.
Puede vender a su mamá,
cuidao’ y no lo hizo ya.
A toda velocidad, él se desvela
pá’ venderte lo que pueda encontrar
como a cien mil más.
Ratzinger el beta, Ratzinger el beta, Ratzinger ¡sí!
—Beethoven: ¿Y bien? ¿Vuestro silencio significa acaso la consideración de dos paquetes de Harina Pan más por tan magnifica pieza artística?
—Sirviente: Creo que significa más bien que hace rato que se fue porque la canción le pareció un insulto a la poca dignidad que le queda, mi señor.
