M
micifus
Delta
Verificado por Whatsapp
Siempre recuerdo con nostalgia el día que conocí a iespana.es, un hosting perteneciente a una red de alojamiento de sitios web en Europa, en Francia, creo haber leído en algún lugar, estaba la casa matriz.
Nunca se me olvida lo feliz que me sentí disfrutar en el hosting compartido gratis que proporcionaba iespana, recién comenzada su apertura, un servicio de streaming el cual funcionaba de maravilla.
Todavía creo sentir en mis oídos la cantidad de elogios recibidos de quienes visitaban mi página, hecha a punta de teclear código html durante varios días. Pero en iespana tuve mi primera gran lección, allí aprendí que lo gratis sale caro o dura poco. Lo último fue lo que me sucedió con iespana, porque de la noche la mañana y sin aviso previo se eliminó el servicio de streaming gratis.
Esa decisión acabó con la fiesta que vivía mi sitio web, llenándose de sombras y penumbra. Sin audio, tenía que inventarme algo nuevo para mantener la atención del sitio, pero nunca pude lograrlo.
Recién había comenzado el Tercer Milenio y empezaban a desarrollarse nuevas tecnologías y herramientas para los sitios web, lo cual impulsó un violento y agresivo desarrollo de la competencia por el dominio del mercado de los hosting, La entrada a la competencia por el mercado del hosting de grandes corporaciones, hizo que las empresas medianas y pequeñas, con poca visión y capacidad tecnológica se quedaran en el camino.
Iespana, tal como muchas veces sucede en los eventos hípicos, se quedó atrás en plena carrera luego de haber tenido una excelente salida del aparato de partida. Sus servicios se fueron deteriorando, no atendían a los clientes, el webmaster no respondía los reclamos, los guindes eran el pan de cada día, hasta que iespana se llenó de problemas económicos y demandas judiciales cerrando su servicio de hosting.
Al parecer se llenó de deudas que no pudo superar y en un pleito múltiple le fueron embargados los discos duros junto con los servidores, quedando los datos de los clientes, entre ellos los datos míos, en un depósito judicial sin poder recuperarlos. Aunque durante muchos meses el dominio estuvo abierto con un aviso que anunciaba su regreso, un día iespana desapareció de la Internet para siempre.
Nunca se me olvida lo feliz que me sentí disfrutar en el hosting compartido gratis que proporcionaba iespana, recién comenzada su apertura, un servicio de streaming el cual funcionaba de maravilla.
Todavía creo sentir en mis oídos la cantidad de elogios recibidos de quienes visitaban mi página, hecha a punta de teclear código html durante varios días. Pero en iespana tuve mi primera gran lección, allí aprendí que lo gratis sale caro o dura poco. Lo último fue lo que me sucedió con iespana, porque de la noche la mañana y sin aviso previo se eliminó el servicio de streaming gratis.
Esa decisión acabó con la fiesta que vivía mi sitio web, llenándose de sombras y penumbra. Sin audio, tenía que inventarme algo nuevo para mantener la atención del sitio, pero nunca pude lograrlo.
Recién había comenzado el Tercer Milenio y empezaban a desarrollarse nuevas tecnologías y herramientas para los sitios web, lo cual impulsó un violento y agresivo desarrollo de la competencia por el dominio del mercado de los hosting, La entrada a la competencia por el mercado del hosting de grandes corporaciones, hizo que las empresas medianas y pequeñas, con poca visión y capacidad tecnológica se quedaran en el camino.
Iespana, tal como muchas veces sucede en los eventos hípicos, se quedó atrás en plena carrera luego de haber tenido una excelente salida del aparato de partida. Sus servicios se fueron deteriorando, no atendían a los clientes, el webmaster no respondía los reclamos, los guindes eran el pan de cada día, hasta que iespana se llenó de problemas económicos y demandas judiciales cerrando su servicio de hosting.
Al parecer se llenó de deudas que no pudo superar y en un pleito múltiple le fueron embargados los discos duros junto con los servidores, quedando los datos de los clientes, entre ellos los datos míos, en un depósito judicial sin poder recuperarlos. Aunque durante muchos meses el dominio estuvo abierto con un aviso que anunciaba su regreso, un día iespana desapareció de la Internet para siempre.